Suscríbete a nuestra newsletter
Reciba novedades y ventajas sobre salud y bienestar.
SHA Magazine Salud y belleza
El verano es el momento perfecto para desconectar del frenético ritmo de vida actual y reconectar con uno mismo. Pero también suele ser sinónimo de excesos, horarios anárquicos y transgresiones dietéticas que, si se prolongan en el tiempo, pueden tener un impacto muy negativo en la salud física, mental y emocional. Desde SHA Wellness Clinic te invitamos a cambiar el chip y aprovechar estos días para seguir cuidándote, eso sí, de manera diferente a como lo haces habitualmente. Si sigues los consejos de nuestro equipo multidisciplinar de expertos disfrutarás de las vacaciones sin que tu salud física, mental y emocional sufra las consecuencias.
Nutrición
Seamos realistas: algún que otro exceso vamos a cometer. De hecho, darse un homenaje de vez en cuando está permitido, siempre y cuando sea de forma puntal. El problema es convertir la excepción en la norma y abusar a diario de alternativas poco saludables, como los fritos, el alcohol o los azúcares. Por eso, el secreto está en el equilibrio. Es decir, si en la comida te has dado un capricho, haz una cena ligera basada en alimentos frescos con propiedades depurativas, antioxidantes y con un alto contenido en agua que te permitan mantenerte hidratado y favorezcan el proceso natural de depuración del organismo. Los pepinos, las verduras de hoja verde, el melón, la sandía, las fresas, las manzanas, la cebolla o el ajo son grandes aliados para conseguirlo. Nuestra recomendación: ensalada de temporada y pescado a la plancha con verduras horneadas.
Ejercicio
Estar a cientos de kilómetros de tu gimnasio y no poder meter en la maleta las mancuernas, el bosu, la kettlebell o el minitrampolín no es excusa para olvidarse del ejercicio físico. Lo único que tienes que hacer es adaptar la rutina de entrenamiento al destino vacacional. En la playa, juega a las palas, nada en el mar, pasea por la orilla o cabalga las olas a lomos de una tabla de surf. En cambio, si vas a la montaña, decántate por el senderismo, el trekking o la escalada. Además, practicar deporte al aire libre tiene un beneficio extra: reconectar con la naturaleza. Por último, el entrenamiento funcional es una buena manera de mantenerse activo durante las vacaciones porque es una disciplina muy completa que trabaja el cuerpo en su totalidad y que se puede realizar en cualquier lugar.
Sueño
Es normal que durante las vacaciones nos acostemos y nos levantemos más tarde de lo habitual. Además, dormir en una cama a la que no estamos acostumbrados puede influir en la calidad del sueño. Y esto es un problema porque el descanso reparador es un mecanismo de restauración vital que ayuda a fortalecer el sistema inmunitario, mejora las capacidades cognitivas y el estado de ánimo, equilibra los niveles hormonales, favorece el mantenimiento de un peso saludable y aumenta los niveles de energía. Para conseguirlo, procura hacer una cena ligera al menos dos horas antes de acostarte, haz ejercicio físico moderado, pero nunca por la noche, evita actividades nocturnas en la cama que dificulten la conciliación, como ver la televisión o consultar las redes sociales y relájate antes de dormir practicando yoga, meditación o respiración consciente.
Reciba novedades y ventajas sobre salud y bienestar.