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SHA Magazine Salud y belleza
La primavera trae variaciones frecuentes de sol y lluvia, lo que viene a significar que la presión barométrica también fluctúa. Asimismo, esta estación también propone una época problemática para las personas alérgicas. Aparecen los estornudos, la secreción nasal, los ojos llorosos y la inflamación de los senos nasales.
Los cambios muchas veces pueden ser sutiles y no afectan a todos de la misma manera, pero vigilarlos siempre es útil para prevenir. Los estudios muestran que más del 60 por ciento de los pacientes con migrañas son conscientes de la influencia que tiene el cambio de estación en sus ataques y reportan más visitas al médico durante la primavera.
La relación entre alergias y migrañas
Existe una íntima relación entre las alergias y las migrañas. Brotan alérgenos durante la primavera y los dolores de cabeza aumentan. La presencia de polen, polvo o hasta los simples olores de tu entorno puede irritar tus fosas nasales y desencadenar una reacción alérgica acompañada de estornudos, congestión, tos y dolores de cabeza.
Por otra parte, la presión barométrica fluctúa durante los cambios estacionales, y dado que los dolores de cabeza barométricos son un factor común para los pacientes con migraña, no puede sorprendernos que estos cambios puedan causar ataques casi de forma rutinaria.
Los senos paranasales son como bolsas de aire cuya presión interna coincide a menudo con la de la atmósfera. Cuando la presión externa cambia repentinamente, crea un desequilibrio entre lo que sucede dentro y fuera de la cabeza, lo que puede provocar ese incomodísimo ataque de migraña, que muchas veces puede resultar tan incapacitante en nuestra vida diaria.
Hidratarse, tomar suplementos de magnesio, dormir bien y el “Método SHA”
El factor más importante para combatir las migrañas primaverales es la identificación de sus desencadenantes personales. Un estudio personalizado del paciente, como siempre hace SHA Wellness Clinic, contribuirá decisivamente a encontrar la mejor forma de prevenir o tratar.
En tiempos en los que el uso de la mascarilla se ha hecho rutinario, sin duda se trata de un elemento fantástico para evitar el contacto directo con alérgenos.
Y por supuesto: acude al médico. Él te dirá si los antihistamínicos y otros medicamentos para la alergia tienen efecto sobre ti y si es seguro usarlos en combinación con otros remedios habituales contra la migraña.
Otra medidas preventivas serían proteger los ojos de la luz, hidratarse correctamente, tomar suplementos de magnesio, seguir un horario regular de sueño, descansar lo suficiente y dedicar tiempo cada día a la meditación.
Todas estas acciones figuran dentro del “Método SHA” y se ha demostrado que reduce la frecuencia e intensidad de los dolores de cabeza y mejora la tolerancia al dolor.
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