Lo último en tratamientos faciales tecnológicos antiarrugas

El colágeno es el objeto de deseo y el santo grial de los tratamientos faciales tecnológicos de rejuvenecimiento facial.

Ya no es la falta de volumen, las arrugas o la falta de tono lo que envejece el rostro, sino la flaccidez y los cambios de textura que produce la caída de la producción de colágeno. Es por eso que las terapias de última tecnología tienen como objetivo recuperarlo y regenerarlo por varias vías, pero todas buscan el milagro: que el propio organismo sea capaz de construir nuevas fibras de colágeno que devuelvan a la piel su firmeza, tersura y luminosidad.

Revisemos los tratamientos faciales tecnológicos disponibles en SHA Wellness Clinic que promueven la regeneración de colágeno y la desaparición de las arrugas y otros signos de la edad.

Thermage: Sus resultados son visibles en una única sesión. Otras tecnologías requieren cinco o más sesiones de tratamiento. La terapia provoca un daño térmico controlado que eleva la temperatura del tejido y estimula la formación de colágenoen las capas profundas de la piel.“El resultado es un rejuvenecimiento natural producido por el trabajo del propio cuerpo sin intervención de productos externos”, explica la doctora Bárbara Dalbos, especialista en Medicina Estética de SHA Wellness Clinic. Entre sus ventajas está que solo se necesita un tratamiento al año.

EMFACE: Es el primer procedimiento que reúne la combinación patentada de Radiofrecuencia sincronizada e HIFES para estimular lamusculatura facial. La Radiofrecuencia sincronizada calienta de modo controlado la   dermis y estimula la regeneración del colágeno y la elastina, al mismo tiempo HIFES produce una contracción selectiva de los músculos de la cara. La doctora Dalbos explica que EMFACE está indicada para “todos los pacientes que quieran combatir la flacidez del rostro y mejorar la calidad de su piel sin utilizar         rellenos. A cualquier edad y sin ninguna contraindicación. Dalbos describe el resultado final como “un lifting discreto en menos de 20 minutos”.

Fraxel: Se trata de un láser que funciona de dentro hacia fuera, creando pequeñas columnas de destrucción térmica en los tejidos que estimulan el crecimiento de células nuevas para reemplazar a las dañadas. Renueva la piel y estimula la producción de colágeno. Funciona muy bien en las pieles dañadas por el sol, el acné y las estrías.

Ultherapy: Es una terapia de ultrasonidos que produce un efecto elegante y discreto de lifting no quirúrgico. El ultrasonido calienta focalmente la piel y estimula la regeneración de colágeno en diferentes capas de la dermis. La tecnología incluye imágenes de ultrasonido que ayudan al profesional a ser más preciso con las capas internas del tejido. Es muy eficaz para mejorar la flacidez del cuello. El efecto completo del tratamiento suele observarse entre los tres y seis meses posteriores a la terapia.

Indiba: Un clásico imbatible. Se trata de una radiofrecuencia facial que incrementa la temperatura de las células de forma artificial para conseguir que reciban más oxígeno y nutrientes y, de esta forma, estimular la regeneración de los tejidos. Con una sola sesión de Indiba se obtienen tres beneficios para la piel: bioestimulación (activación del colágeno y los fibrolastos), microcirculación (incremento del flujo sanguíneo y del drenaje) e hiperactivación (una ayuda para eliminar grasas y regenerar el colágeno).